RUSIA VS BEVERLY HILLS
Programa
PIANO CONCERTO NO. 2 en do m. Op.18
Rachmaninov, Sergei - Arr. Iain Farrington
1. Moderato
2. Adagio sostenuto
3. Allegro scherzando
SYMPHONIC DANCES, Op 45
Rachmaninov, Sergei – Arr. Iain Farrington
1. Non Allegro
2. Andante con moto
3. Lento assai- Allegro vivace
Rusia vs Beverly Hills
El Ensemble de la Orquesta Sinfónica del Atlántico, bajo la dirección de Isabel Costes, y con la participación del reconocido pianista mexicano Alain Del Real, presenta el programa "Rusia vs Beverly Hills". Con este sugerente título, se destaca el contraste entre las dos etapas fundamentales en la vida y creación de Sergei Rachmaninov: su Rusia natal, donde forjó su inconfundible lenguaje melódico y armónico, y su exilio en Estados Unidos, donde la nostalgia y el virtuosismo definieron su última producción.
Este diálogo entre dos mundos queda reflejado en las obras seleccionadas. El Concierto para piano n.º 2 en do menor, Op. 18, una de sus partituras más emblemáticas, condensa la esencia del romanticismo tardío, con su expresividad desbordante y su lirismo apasionado. Por otro lado, las Danzas Sinfónicas, Op. 45, última obra orquestal del compositor, representan una síntesis magistral de su estilo, donde la brillantez rítmica y la riqueza armónica conviven con citas a su propia música y referencias a la tradición litúrgica rusa.
Interpretadas en un formato camerístico, estas piezas adquieren una dimensión más íntima sin perder su intensidad expresiva, permitiendo descubrir nuevos matices en la escritura de Rachmaninov. El evento contará con la participación del pianista Alain Del Real como solista y se enmarca en la innovadora serie Sinfónicos en Miniatura, que desde 2015 ofrece una relectura del gran repertorio sinfónico en formatos reducidos, acercando estas obras maestras a nuevos públicos.
Este diálogo entre dos mundos queda reflejado en las obras seleccionadas. El Concierto para piano n.º 2 en do menor, Op. 18, una de sus partituras más emblemáticas, condensa la esencia del romanticismo tardío, con su expresividad desbordante y su lirismo apasionado. Por otro lado, las Danzas Sinfónicas, Op. 45, última obra orquestal del compositor, representan una síntesis magistral de su estilo, donde la brillantez rítmica y la riqueza armónica conviven con citas a su propia música y referencias a la tradición litúrgica rusa.
Interpretadas en un formato camerístico, estas piezas adquieren una dimensión más íntima sin perder su intensidad expresiva, permitiendo descubrir nuevos matices en la escritura de Rachmaninov. El evento contará con la participación del pianista Alain Del Real como solista y se enmarca en la innovadora serie Sinfónicos en Miniatura, que desde 2015 ofrece una relectura del gran repertorio sinfónico en formatos reducidos, acercando estas obras maestras a nuevos públicos.
Un viaje a través de dos obras maestras
El programa incluye dos composiciones icónicas de Rachmaninov, adaptadas por el compositor británico Iain Farrington, quien logra mantener la riqueza sinfónica de las piezas originales con una perspectiva más cercana y personal.
El Concierto para piano No. 2 en Do menor, Op. 18, compuesto en 1901, es una de las obras más queridas del repertorio clásico. Desde sus solemnes acordes iniciales, el público es transportado a un paisaje sonoro lleno de contrastes dramáticos, gloriosas melodías y un virtuosismo deslumbrante. Los momentos contemplativos del segundo movimiento dan paso a un final vibrante y triunfal, donde el piano y la orquesta se entrelazan en una danza emocionante.
Por su parte, las Danzas Sinfónicas, Op. 45, la última obra orquestal de Rachmaninov, compuesta en 1940, exploran un universo musical que combina ritmos vibrantes, temas nostálgicos y un profundo simbolismo. A lo largo de los tres movimientos, el compositor cita obras propias e introduce referencias al "Dies Irae", un motivo recurrente en su música, culminando en un final lleno de energía y brillantez técnica.
El Concierto para piano No. 2 en Do menor, Op. 18, compuesto en 1901, es una de las obras más queridas del repertorio clásico. Desde sus solemnes acordes iniciales, el público es transportado a un paisaje sonoro lleno de contrastes dramáticos, gloriosas melodías y un virtuosismo deslumbrante. Los momentos contemplativos del segundo movimiento dan paso a un final vibrante y triunfal, donde el piano y la orquesta se entrelazan en una danza emocionante.
Por su parte, las Danzas Sinfónicas, Op. 45, la última obra orquestal de Rachmaninov, compuesta en 1940, exploran un universo musical que combina ritmos vibrantes, temas nostálgicos y un profundo simbolismo. A lo largo de los tres movimientos, el compositor cita obras propias e introduce referencias al "Dies Irae", un motivo recurrente en su música, culminando en un final lleno de energía y brillantez técnica.